Isaac Peral y Caballero

Isaac Peral
El 1 de junio de 1851 fue el día en el que vino al mundo Isaac Peral, en el callejón de Zorrilla, esquina a la calle de San Francisco de la Ciudad Portuaria. Hijo de la cartagenera Isabel Caballero y deJuan Manuel Peral, primer condestable de la tercera brigada del Cuerpo de Artillería y que fallece cuando su hijo tenía catorce años. Además, estos tuvieron otros dos hijos: Pedro, que nació en 1849, perteneció como todos sus hermanos a la Real Armada, falleciendo de capitán de fragata en el año  1897; y Manuel, que nació en 1862. El abuelo de este insigne hombre también estuvo relacionado con el ejército, puesto que fue capitán de Artillería de Marina. Isaac ingresó en el colegio naval y en 1872 va a Cuba como segundo Comandante del cañonero “Dardo”, siendo en la población de Nuevitas de este país dónde con tan sólo doce marineros ataca al enemigo y le arrebata un importante botín. Su aventura en Cuba no acabaría aquí, ya que en 1882 realiza nuevas misiones. Aparte de participar en la Guerra de Cuba, también hizo lo propio en la Tercera Guerra Carlista.

En 1885 fallece el catalán Narciso Monturiol, persona que trabajaba en el proyecto de un submarino parecido al de Peral, por lo que al morir, al cartagenero se le acusa de plagio. Lo cierto es que ambos tenían un proyecto muy parecido con un mismo fin, pero con diferentes trayectorias, ya que Peral destacó por la rápida integración de innovaciones procedentes de otros países, dada su especialización en temas relacionados con la electricidad.

Isaac Peral pensaba que el proyecto en el que estaba trabajando sería muy beneficioso para España, porque sería un nuevo medio de defensa, y gracias a su afán, su idea no deja de obtener un relativo éxito en los medios altos de la política española. El submarino se sumergió varias veces a diferentes profundidades, consiguiendo incluso desplazarse por cortos trayectos en aguas de la ciudad andaluza de Cádiz en 1888. La prensa de la época lo alabó aunque, debido a las dificultades encontradas para que el gobierno siguiera apoyando su proyecto, decidió abandonar en 1891 la Marina para construir por su propia cuenta los materiales que necesitaba. El submarino fue construido de plancha de acero, su forma era fusiforme y estaba capacitado para navegar a profundidades de hasta 30 metros. Desplazaba 77 toneladas en superficie y 85 en inmersión. Sus dimensiones eran 22 metros de eslora y 2’87 metros de manga en su Cuaderna Maestra (costilla principal del submarino y donde éste tiene su mayor manga).

Submarino de Isaac Peral (Situado en el Museo Naval de Cartagena)

Cuando quedó libre de mandos en 1891, le propusieron ser político, y se presentó, pero mal hizo, ya que no era experto en este campo, y de hecho, el acta de las elecciones en el Puerto de Santa María, dónde se enfrentaba ni más ni menos que contra el hijo del Ministro de Marina, se envió a Madrid, y la declararon “sucia”, siendo este hecho un importante indicio de los pucherazos de la época.

Tumba de Isaac Peral
Por aquel tiempo era María Cristina la Reina Regente, la cual le regaló al cartagenero un sable de honor por todos sus méritos. Además, Isaac también consigue que en muchos pueblos y ciudades se le ponga su nombre a calles, plazas e incluso barrios. La humildad del inventor queda reflejada cuando el célebre constructor del Glasgow, Mr. Thomson, le propone ir a trabajar con él y el cartagenero le responde: “el invento no es mío, lo he dado a mi patria”. Peral no sólo inventa el submarino, también crea un acumulador eléctrico, una ametralladora (también eléctrica) y un proyector luminoso. 

El 22 de mayo de 1895,  el genio cartagenero fallece en Berlín, y posteriormente se traslada a Madrid su cadáver dónde se le dio cristiana sepultura en el cementerio de Santa María de la Almudena, el día 29 de mayo del año 1895. Desde 1911 sus restos descansan en Cartagena, dónde el ayuntamiento le levantó una gran tumba en el cementerio de Nuestra Señora de los Remedios.

Entrada publicada el 09/10/11 | Actualizada el 15/11/16