Gen Rosso |
La original actividad del Gen Rosso surge, desde el principio, de su bagaje artístico-cultural, de la internacionalidad de sus componentes (personas provenientes de 9 naciones, entre ellas la española) y del compromiso personal de cada uno de poner en práctica, en el contexto de la vida cotidiana, los valores de los que se hace embajador.
Tras más de 30 años festejando la fe a través de la música y la danza, Gen Rosso ha pasado pasado Cartagena, y gracias a ello, he tenido la oportunidad de entrevistar a dos de sus miembros, José Manuel y Nando.
¿Cómo definiríais al Gen Rosso?
-José Manuel: Gen Rosso es un nombre en italiano. Gen, es la abreviación de generación nueva, y Rosso, significa rojo en español. Ello hace referencia al color de la primera batería del grupo. Gen Rosso lo definiría como un grupo por el que a través de su lenguaje artístico-musical intenta transmitir una serie de valores de paz, fraternidad, igualdad, hermandad... entre pueblos... de una forma simple, pero a la misma vez, de una manera decidida.
Nando, ¿cómo y por qué ingresaste en el grupo?
-Nando: Hace unos años cursé estudios de piano y siempre me ha gustado transmitir a través de la música y el canto diferentes mensajes de paz, de amor, de amor verdadero y gracias al Gen Rosso se me da esta oportunidad. Con el grupo puedo viajar por todo el mundo y puedo entregar estos valores. Sin duda alguna, considero que es un medio más de evangelización.
¿De qué manera se vive la fe en el Gen Rosso?
-José Manuel. Pienso que existe una parte individual de cada uno, que considero que es personal pero además existe una parte comunitaria. Nosotros intentamos vivir el binomio de fe y vida de una manera natural y simple. Ser cristiano, evangelizar, hablar de tu vida, hablar de la presencia de Jesús entre nosotros... Una frase que me gustaría subrayar del Evangelio es la de “dónde dos estén reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. Nosotros intentamos creernos esto y cuando hacemos una canción, una gira... nuestro punto de vista cambia.
El Gen Rosso está arraigado en los Focolares. ¿Qué es este movimiento? ¿Quién es Chiara Lubich?
Gen Rosso con jóvenes cartageneros |
Y, ¿cómo creéis que reciben vuestros espectadores lo que transmitís?
-Nando: Es un poco lo que comentaba antes José Manuel. Nosotros intentamos vivir lo que cantamos. Mucha gente nos escribe sobre el espectáculo, sobre las canciones... Se tratan de mensajes que llegan al corazón. Y además, la gente nos escribe diferentes consejos para mejorar en el espectáculo.
Recuerdo que cuando estuvimos en China, una amiga, la que nos hizo de guía por el país, en los últimos días que estuvimos por allí nos dijo “sólo hoy he podido entender lo que vosotros vivís cantando” No le hablamos de Dios, o de la paz, de la fe... Sólo mediante las canciones, mediante la vida... lo pudo entender.
¿Nos podríais contar alguna anécdota que os haya ocurrido durante este tiempo?
-José Manuel: Sí. Hace cinco años, un chico de una cárcel me regaló un anillo a mí, un desconocido. Él me dijo que era porque quería que algo de su vida saliese de esa prisión, y que pudiera viajar por todo el mundo. Este hecho me marcó mucho y ya lo habíamos contado varias veces en los concierto, pero cuando creamos este espectáculo, nos pareció buena idea que fuera contado.
Anécdotas hay muchas. También te podría comentar algo de la chica que comentaba anteriormente Nando. Nosotros la conquistamos durante un festival internacional en China al que siempre nos acompañaba. Nosotros representábamos a Italia. Al grupo nos reservaron un sitio muy bueno, y a un grupo de unas chicas de Filipinas que tenían un sitio un poco más atrás que nosotros, se lo quitaron otros. Nosotros les dejamos nuestro sitio a las chicas y nos sentamos en unas escaleras. Este hecho conmovió a nuestra amiga y empezó a llorar porque nos había oído cantar, días antes, mensajes a una humanidad que sufre y que da su vida. De estas experiencias hay muchísimas.
A lo largo de los 30 años que lleva funcionando Gen Rosso, os habréis encontrado jóvenes de muchos tipos, ¿en qué ha cambiado el joven de hoy? ¿es más fácil o más difícil llevarles un mensaje de paz, de fe… ahora que hace 10 o 15 años?
Gen Rosso con jóvenes cartageneros |
Una cosa que he notado estos días, en Cartagena, es que a la vez te encuentras con una juventud muy sana. Sin duda alguna, pienso que la familia juega un papel muy importante. Aquí, en Cartagena, se ve a los jóvenes con los pies en los suelos... con los cimientos sólidos. En cambio, en Alemania, dónde también hemos hecho este tipo de proyecto, son más “modernos”, pero a la vez más conflictivos. Allí hay mucho trabajo por hacer ya que notas a muchos jóvenes que vienen de familias problemáticas. En España he notado que las familias se están destrozando. La familia es la célula de la sociedad, como decía Juan Pablo II. En Alemania, ahora se ven los frutos de ese tipo de familias desestructuradas. Los jóvenes no tienen un punto de referencia en la vida y además están faltos de cariño.
Pasa el tiempo y Gen Rosso no pasa de moda, ¿cuál es vuestro secreto?
-Nando: En estos últimos años, el Gen Rosso, ha viajado por muchos países que antes nunca habíamos visitado, países como China, Kenia, Burundi, Cuba, Marruecos, Australia, Tailandia... Pienso que estoy viviendo un momento histórico en el grupo, que tiene 45 años. ¿Cuál puede ser el secreto? Yo pienso que es debido a dos cosas. Por una parte, el grupo nació de una inspiración de Chiara Lubich, que es una mujer de Dios, y el Gen Rosso es fruto de esta inspiración. Es una obra que Dios acompaña como un instrumento para llevar al mundo un mensaje de unidad entre todos los pueblos. Por otro lado, creo que se trata de lo que vivimos nosotros cada día, de ver con ojos nuevos. Esto significa que aceptas a otros, tanto sus talentos como sus defectos, y esto supone una fuente de novedad, de inspiración, para componer nuevas canciones.
¿Cuál es el motivo por el que habéis hecho una parada en Cartagena?
-José Manuel: Desde hace tiempo queríamos hacer el proyecto “Fuertes sin violencia” en España. No sólo consiste en tocar e irte, sino que además estamos trabajando durante una semana con alumnos de diferentes colegios, para los que durante ese tiempo somos sus nuevos profesores de baile, música, canto... En definitiva, son varios factores por los que hemos venido a Cartagena y, siendo yo español, es un placer ver como han respondido los jóvenes de mi país.
¿Qué actos y actividades habéis realizado en la ciudad?
Gen Rosso con jóvenes cartageneros |
El espectáculo ¿es un lenguaje que los jóvenes entienden? ¿es una posible vía para la Nueva Evangelización de la que tanto habla el Papa?
-José Manuel: Nosotros pensamos que sí, que es una forma más. De cara a los jóvenes, la música es un lenguaje fundamental. A cada uno se le queda una frase distinta.
Cuando estuvimos en Méjico, el año pasado, en una ciudad periférica con bastantes problemas de violencia y drogadicción, un diputado, el que nos llevó hasta allí, quiso abrir el concierto. Al día siguiente, en el encuentro más íntimo con los jóvenes, también vino y nos preguntó si sabíamos el porqué estaba tan interesado de que Gen Rosso viniese a su ciudad. Él nos comentó que era porque, cuando tenía 15 años, el grupo fue a Méjico y una frase del concierto se le quedó grabada: “conozco otra humanidad, la que cree en el amor”. Esto le llevó a ser político y a luchar por el bien común. Sin duda alguna, Dios usa distintos métodos para llegar a cualquier sitio.
¿Conocíais Cartagena?
-José Manuel: Sí, estuve una vez, hace ocho años, trabajando en la obra del ARQUA.
De lo que habéis podido conocer ¿qué destacaríais?
-Nando: En este tiempo que hemos estado aquí hemos podido ver poco de la ciudad, pero esperamos poder ver más. Lo poco que he visto me gusta, ya que mi ciudad natal, Nápoles, también tiene el mar muy cerca.
-José Manuel: El entusiasmo, las ganas de vivir y de hacer cosas nuevas que nos han transmitido los jóvenes de la ciudad.
¿Qué mensaje os gustaría dejar reflejado para todas las personas que tengan la ocasión de leer la entrevista?
-Nando: Yo espero que a esa gente podamos encontrarla en un concierto, pero para poder conocerla más de cerca.
-José Manuel: A mí me gustaría dejar una frase que escuché con 16 años: “tenemos sólo una vida, y merece la pena gastarla bien porque se pueden hacer muchas cosas”. Pienso que no hay que desaprovecharla y tenemos que ser generosos.
Entrada publicada el 25/03/12